Los Pomos, La Vega.- Una familia feliz y normal creía tener Teresa Almonte hasta que la felicidad pasó a ser una historia escalofriante y triste en su vida, luego de enterarse de que su hija Alexandra estaba embarazada de su padre.
Con el corazón destrozado y las lágrimas derramándose por su rostro, pero como una guerrera, contó una desgarradora historia. Sin saber qué ocurría, empezó a sospechar que algo pasaba con su hija de 12 años, porque la niña pasaba el tiempo en la casa, aislada y con miedo, expresó la señora Almonte.
“Voy donde mi mamá y le digo: mami, ve a la escuela (o a mi hermana que estaba ahí), investiga qué le pasa a mi hija, porque a mi hija le pasa algo, le digo que vaya al salón y no quiere hacer nada”. Al regresar a la casa, Teresa encontró a su pequeña sentada en el mueble, ocultando su abdomen con un cojín, mientras que la madre le preguntaba qué le pasaba y la niña le dijo: !Nada!
El instinto de una madre que conoce a su hija, la llevó a seguir insistiendo a la niña que algo le pasaba y procedió a quitarle el cojín y miró la pancita de la niña, era como si supiera que estaba embarazada, pero debía comprobarlo.
Teresa, sofocada y llorando, dijo que inmediatamente llamó a su esposo para que dejara lo que estaba haciendo y que la ayudara con la situación, sin saber que su pareja era el culpable.
Este se presentó como si no supiera lo que sucedía, mientras la madre preocupada, interrogaba a la niña que si alguien la había tocada en la escuela, refriéndose a un compañero o maestro.
Dijo al esposo que fuera a la farmacia a comprar una prueba de embarazo, con la que la madre procedió hacerle la prueba a la niña y se confirmó su sospecha.
“Las lágrimas que duelen no son las que caen de un rostro, sino las que inundan el corazón y así está mi corazón, inundado de dolor”, expresó Teresa mientras que, con su mano derecha, se golpeaba en el pecho.
Además la madre expresó que se enteró, a través de un audio, que su pareja dijo que embarazó a su propia hija.
La familia paterna acusa a la madre de saber lo que sucedía y mantener oculto el embarazo de su hija durante ocho meses.
Alexandra, hija de Teresa Almonte y Alex, dio a luz el 25 de diciembre del 2024, 23 días después de que su madre se enterara de la situación.
La bebé nacida de la niña de 13 años es hija de su abuelo, nació con una condición médica en el cerebro llamada microcefalia y hasta ahora se encuentra en manos de los galenos.
