SANTO DOMINGO-. La calidad de los servicios de salud en la República Dominicana es un tema complejo que involucra una combinación de factores relacionados con el área, pese a los últimos años ha habido avances en términos de cobertura y acceso a servicios médicos, la calidad sigue siendo un desafío importante para el país.
En términos de cobertura, el sistema de salud dominicano ha mejorado significativamente, especialmente a través de la implementación de la Ley 87-01, que creó el Sistema Dominicano de Seguridad Social (SDSS) en 2001.
Esta ley permitió que un porcentaje importante de la población tuviera acceso a un seguro de salud, principalmente a través de las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS). Sin embargo, aún existen desafíos.
La calidad de los servicios de salud varía enormemente entre las zonas urbanas y rurales. En las ciudades principales como Santo Domingo, el acceso a hospitales y clínicas es generalmente mejor, pero en las zonas rurales y menos desarrolladas, la infraestructura y los servicios médicos pueden ser limitados.
Aunque muchos trabajadores están afiliados al sistema de salud, una gran parte de la población que trabaja en la economía informal no tiene acceso a seguros de salud adecuados. Esto limita su acceso a servicios médicos de calidad.
A pesar de que el gobierno ha incrementado el presupuesto para la salud en los últimos años, este sigue siendo insuficiente para cubrir todas las necesidades del sector. Los hospitales públicos, a pesar de los esfuerzos de modernización, suelen enfrentar problemas de falta de insumos médicos y personal insuficiente.
Mientras que el sector privado de salud es más robusto y tiene una mejor infraestructura, pero los costos son más altos, lo que limita el acceso a personas con menor poder adquisitivo.
