San Francisco de Macorís
“Porque ese era mi manos y pies”.
El pasado fin de semana, específicamente el sábado 14 del mes en curso, fue hallado el cuerpo sin vida del recluso Juan Julio Medina Almonte, de 27 años de edad, quien estaba cumpliendo la pena máxima por homicidio desde el año 2011 un hecho ocurrido en Samaná.
Almonte fue trasladado el viernes al centro penitenciario de San Francisco de Macorís, Vista al Valle. Estando en ese centro, fue sometido, según testigos, a diferentes atropellos y lo llevaron al área de aislamiento mejor conocida como la «Plancha»
Luego de estar en ese lugar, lo llevaron al área de reflexión, donde supuestamente se quitó la vida.
Según el padre del fallecido, Jesús Medina, “había una compostura entre el jefe de aquí, Vista al Valle, y el de allá, porque no había llegado la firma para trasladar a mi hijo, y el director le estaba sacando vuelta a la mujer mía, porque ella siempre iba a darle vueltas, y lo último que le dijo es que, respecto a ese caso, no vaya allá más”, indicó Medina.
Según los familiares del fallecido, este caso debe ser investigado por todas las incongruencias que rodean el hecho.
Se pone en tela de juicio el supuesto suicidio, según lo expresado por Medina: “Me lo trasladaron por la mañana y ya en la noche me lo estrangularon”.
Medina indicó que los militares, junto con un tal Samana, le quitaron la vida a su hijo, estrangulandolo.
En ese sentido, cuando Medina exigió una explicación por lo ocurrido, un oficial del centro le indicó que su hijo había peleado horas antes de su deceso con el mencionado Samana.
Medina explica que el cuerpo de su hijo presenta moretones y signos de estrangulamiento, y que, para disimular el hecho, le pusieron unos trapos en el cuello.
Los familiares del fallecido piden justicia por la muerte extraña de su ser querido.“Porque ese era mi manos y pies”, resaltó Medina.
Rafael de los Santos, tío del fallecido, señaló que le pusieron un nombre falso al cadáver para que los familiares no pudieran identificarlo.
De los Santos precisó que a su sobrino se lo trajeron, al tal mencionado Samana, para que arreglara cuentas con él, porque desde la cárcel de Samaná tenían riñas.
El cuerpo de Juan Julio Medina se encuentra en el Hospital San Vicente de Paúl, en la morgue. Cabe mencionar que el cuerpo del occiso fue mutilado. Según testigos, se le encontraron diferentes heridas con armas blanca, específicamente letras en su piel.
En medio del dolor que invade el corazón de la familia Medina, los familiares y amigos piden que se aclare este caso y que no quede impune este acto tal atroz.
